Objetos mágicos

El martes 8 de octubre a las 18 hs. empieza en Casa de Letras el taller de lectura y escritura Objetos mágicos, coordinado por Pablo De Santis.  Dentro y fuera del reino de la literatura fantástica, algunos objetos alcanzan en los libros un resplandor especial: unen a los personajes en una trama común, concentran sentido, aceptan el peso del símbolo, se convierten en emblema de la ficción. A lo largo de ocho encuentros, el taller propone asomarse al museo de estas cosas prodigiosas y a la vez utilizar algunos objetos cercanos como inspiración y estímulo para la escritura. Conversamos al respecto con Pablo De Santis.

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¿Cuál es la función de los objetos mágicos en la literatura?

Los objetos mágicos son un catálogo de todas las cosas que no podemos hacer: viajar en el tiempo, volvernos invisibles, transportarnos a regiones lejanas de forma instantánea, pedir tres deseos (y que se cumplan) o ver a la vez todas las cosas del universo, como propuso Borges en “El Aleph”. También hay objetos mágicos con los que es mejor no cruzarse, porque llevan a la locura y a la  perdición. El más clásico de los objetos mágicos es el anillo, presente en tantas tradiciones. Y el anillo es para mí un símbolo de la forma del cuento, por el modo como el final de un relato tiene una profunda unión con el principio.

¿Qué autores se leerán en el curso? ¿Cuál será la metodología de trabajo en clase?

Buscaremos objetos mágicos en  Borges, en Silvina Ocampo, en W.W. Jacobs, autor de “La pata de mono”, clásico del horror. Y también en William Faulkner y en el olvidado John Collier. (Hay una serie de cuentos que yo llamo “género Alfred Hitchcock presenta”, porque aquel viejo programa de televisión se alimentaba de  relatos ingeniosos e irónicos, cercanos al policial y al horror. Collier era uno de estos autores).
En los otros cursos que he dado en Casa de Letras a través de los años me ha funcionado bien el método de destinar una mitad de la clase a la exposición del tema, y la otra a la lectura de los trabajos de los participantes y a los diálogos que surgen a partir de las lecturas. A la hora de escribir hay dificultades personales de cada uno, pero la mayoría de los problemas son comunes a todos los que escribimos. Por eso creo que siempre sirven los comentarios sobre textos ajenos. Por ejemplo, el problema de cómo empezar o cómo terminar un cuento.

¿A quiénes está dirigido el curso? ¿Es necesario tener alguna experiencia previa? 

El curso está dirigido a quienes quieran leer y escribir. No se necesita experiencia previa, porque prácticamente nacemos con la experiencia de escuchar cuentos. Y también con la experiencia de soñar, esa ficción privada.  La pesadilla es el más antiguo género literario, como decía Borges.